Filosofía: qué es, origen y primeros filósofos

Teoría

 

EL LOGOS GRIEGO COMO TEORÍA DE LA NATURALEZA BASADA EN LA GEOMETRÍA

La sociedad comercial griega de los siglos VII y VI antes de Cristo sustituye el pensamiento mítico, gracias a la colisión entre creencias de culturas distintas, por la postulación de un orden lógico, necesario y dinámico de la naturaleza susceptible de ser descrito racionalmente. Los primeros filósofos plantean la posibilidad de teorizar y construir un saber radical y necesario sobre lo que hay, postulando la existencia de un principio originario de todo o arjé. La geometría es su modelo de saber porque proporciona un conocimiento incontrovertible mediante demostraciones racionales, objetivas (no dependientes de la subjetividad particular de cada uno) y cerradas sobre sí mismas (no precisan de elementos externos a los propios postulados geométricos). Aunque la geometría ya había sido desarrollada en Babilonia y en el antiguo Egipto, es en la Grecia antigua donde surge la necesidad de demostrar o justificar por qué las verdades que proporciona son esas y no otras. Los presocráticos ampliaron esa demanda de justificación racional a todos los fenómenos de la realidad, es decir, buscaron el porqué de todas las cosas.

 

LOS DISTINTOS MODELOS METAFÍSICOS PRESOCRÁTICOS


Los milesios
Tales de Mileto
Tales (624 a. C. – 546 a. C.): sus estudios geométricos sobre el círculo como símbolo de la nueva racionalidad y del todo, le lleva a buscar un principio de la vida y del todo (todo está vivo: hilozoísmo), encontrándolo en el agua, única sustancia que se manifiesta de diferentes formas. Segundo teorema: «sea B un punto de la circunferencia de diámetro AC, distinto de A y de C. Entonces el triángulo ABC, es un triángulo rectángulo».

 

Anaximandro de Mileto
Anaximandro (610 a. C. – 545 a. C.): ápeiron, lo indeterminado, lo indefinido, que no se transforma, sino que es una multiplicidad que se ordena en un Cosmos, un orden o equilibrio. El origen del Cosmos sería la segregación de lo frío y lo caliente en forma de torbellino. El hombre procede de los peces.
Anaxímenes de Mileto
Anaxímenes (585 a. C. – 524 a. C.): aire (rarefacción y condensación). Introduce el concepto de elemento.

Pitágoras y los pitagóricos
Pitágoras de Samos
Pitágoras de Samos (580 a. C. – 495 a. C.): los números (lo par y lo impar), el mundo es explicable matemáticamente, cuantificable, mientras que las cualidades de las que nos informan los sentidos son mera apariencia. Teorema de Pitágoras: «en todo triángulo rectángulo el cuadrado de la hipotenusa es igual a la suma de los cuadrados de los catetos».
La escuela pitagórica de Crotona (Magna Grecia) era una secta de carácter científico, religioso y político, que seguían un modelo de vida estrictamente regulado. Cultivaron las matemáticas, la música y la astronomía. Afirmaban la inmortalidad y la transmigración de las almas.

Heráclito de Éfeso
Heráclito de Éfeso
Heráclito de Éfeso (540 a. C. – 470 a. C.), conocido como El oscuro por sus crípticos aforismos, defendía que todo estaba en un devenir absoluto: «todo fluye, nada permanece». Ese cambio o movimiento permanente se debe a que la multiplicidad de contrarios está en constante lucha, aunque todo está recogido en una armonía, ley, logos o fuego, que es un equilibrio dinámico entre las tensiones de estos.

Parménides de Elea
Parménides de Elea
Parménides de Elea (530 a. C. – 470 a. C.) es famoso por defender en su poema que «el ser es y el no-ser no es». En tal poema señala dos vías:
  • vía de la verdad: el ser (único, inmóvil, eterno, finito, homogéneo, indivisible, esférico, conocido racionalmente) es y no puede no ser; ser=pensar
  • vía de la opinión: pluralidad, cambio, movimiento, lo captado por los sentidos, apariencia, no-ser


Empédocles de Acragas
Empédocles de Agrigento
Empédocles de Acragas (495 a. C. – 430 a. C.), actual Agrigento (Sicilia), defiende que no hay un solo arjé, sino que hay cuatro elementos inmutables: agua, aire, tierra, fuego. Por eso se dice que fue el primer pluralista, frente a los monistas (que postulaban un solo arjé) anteriores. Esos elementos, según él, estarían animados por dos fuerzas opuestas: el Amor tiende a unir y la Discordia tiende a separar.

Anaxágoras de Clazomene
Anaxágoras de Clazomene
Anaxágoras de Clazomene (500 a. C. – 428 a. C.) defiende que todo está compuesto de jrémata (homeomerías para Aristóteles), que son pequeñas partículas de todas las sustancias que formaban una masa compacta y maciza en el inicio de los tiempos. Sería el Nous (Inteligencia, Entendimiento, Dios demiurgo u ordenador) quien les imprimió un movimiento inicial de remolino a las jrémata, configurando así el mundo que observamos.

Los atomistas
Leucipo de Mileto
Demócrito de Abdera
Los atomistas, Leucipo de Mileto (s. V a. C.) y Demócrito de Abdera (460 a. C. – 370 a. C.) defendía que todo está compuesto de átomos inengendrados, indestructibles, inmutables, infinitos, compactos, homogéneos, indivisibles, de diferentes formas. Estos se mueven eternamente en el vacío. Debemos a estos autores el primer modelo enteramente mecanicista, sin finalismos ni teleología, de cómo funciona el universo.

 

Cargador Cargando...
Logotipo de EAD ¿Tarda demasiado?

Recargar Recargar el documento
| Abrir Abrir en una nueva pestaña

Descargar [94.57 KB]

Práctica

 

1. Vea el siguiente vídeo y tome apuntes sobre lo que dice de cada uno de estos filósofos.

 

2.- Lea atentamente estos textos y responda a las preguntas:
Que no es una ciencia productiva resulta evidente ya desde los primeros que filosofaron: en efecto, los hombres —ahora y desde el principio— comenzaron a filosofar al quedarse maravillados ante algo, maravillándose en un primer momento ante lo que comúnmente causa extrañeza y después, al progresar poco a poco, sintiéndose perplejos también ante cosas de mayor importancia, por ejemplo, ante las peculiaridades de la luna, y las del sol y los astros, y ante el origen del Todo. Ahora bien, el que se siente perplejo y maravillado reconoce que no sabe (de ahí que el amante del mito sea, a su modo, «amante de la sabiduría»: y es que el mito se compone de maravillas). Así pues, si filosofaron por huir de la ignorancia, es obvio que perseguían el saber por afán de conocimiento y no por utilidad alguna.
Aristóteles. (1994). Metafísica, pp. 77-78.
  1. ¿Cuál es la pregunta que trata de responder este texto?
  2. Explique con sus palabras la tesis que se defiende en el texto.
  3. Muestre las ideas y la estructura argumental de que se sirve el autor para defender esa tesis.
  4. ¿Qué otra posible respuesta puede darse o se ha dado en la historia de la filosofía a la pregunta que trata de responder este texto? Dé al menos dos argumentos para apoyarla.

 

A diferencia de las cosmogonías míticas que utilizaban como principios de explicación fuerzas personificadas de dioses y espíritus, los primeros filósofos intentan explicar sobre la base de principios físicos o lógicos. En este sentido, su especulación es ciencia física y podemos considerarlos como científicos primitivos que intentaron dar razón del mundo material. Sin embargo, los presocráticos no se detuvieron en los datos de lo observable, sino que fueron más allá de las apariencias. Ya sea el agua, el aire o el fuego lo que designen como physis ésta no «aparece» como tal materia primigenia, es decir, como elemento último de las cosas. Para llegar a concebir uno de los elementos como último de todo lo existente hubieron de valerse de la razón especulativa. La unidad que afirmaron era una unidad puesta por el pensamiento, abstraída de los datos sensibles aunque fuese material.
Sánchez Meca, D. (2013). Historia de la Filosofia Antigua y Medieval, pp. 18-19.
  1. ¿Cuál es la pregunta que trata de responder este texto?
  2. Explique con sus palabras la tesis que se defiende en el texto.
  3. Muestre las ideas y la estructura argumental de que se sirve el autor para defender esa tesis.
  4. ¿Qué otra posible respuesta puede darse o se ha dado en la historia de la filosofía a la pregunta que trata de responder este texto? Dé al menos dos argumentos para apoyarla.

 

[A]l decir que los presocráticos eran hombres racionales, solo quiero decir esto: que las grandes y audaces teorías que expresaron fueron presentadas no como declaraciones ex cátedra para que las creyeran los fieles y las desatendieran los impíos, sino como conclusiones de unos argumentos, como proposiciones razonadas para que unos hombres razonables las estudiaran y las discutieran. Y al afirmar que los presocráticos fueron los padres del pensamiento racional tan solo afirmo que fueron los primeros hombres que conscientemente subordinaron las afirmaciones gratuitas al argumento y el dogma a la lógica. Tal vez algunos lectores se pregunten si una forma tan débil de racionalidad no es una propiedad demasiado común como para merecer admiración: a estos les recuerdo el aforismo del obispo Berkeley: todos los hombres tienen opiniones, pero pocos hombres piensan.
Barnes, J. (2000). Los presocráticos, p. 11.
  1. ¿Cuál es la pregunta que trata de responder este texto?
  2. Explique con sus palabras la tesis que se defiende en el texto.
  3. Muestre las ideas y la estructura argumental de que se sirve el autor para defender esa tesis.
  4. ¿Qué otra posible respuesta puede darse o se ha dado en la historia de la filosofía a la pregunta que trata de responder este texto? Dé al menos dos argumentos para apoyarla.

 

Creo que la matemática es la fuente principal de la fe en la verdad eterna y exacta y en un mundo suprasensible e inteligible. La geometría trata de círculos exactos, pero ningún objeto sensible es exactamente circular; por muy cuidadosamente que manejemos el compás, siempre habrá imperfecciones e irregularidades. Esto sugiere la idea de que todo el razonamiento exacto comprende objetos ideales, en contraposición a los sensibles; es natural seguir adelante y argüir después que el pensamiento es más noble que los sentidos y los objetos de la idea más reales que los que percibimos por los sentidos. Las doctrinas místicas respecto a la relación del tiempo con la eternidad también se apoyaron en las matemáticas puras, porque los objetos, como los números, si son reales, son eternos y no colocados en el tiempo. Estos objetos eternos pueden ser concebidos como pensamientos de Dios. De allí se deriva la doctrina de Platón de que Dios es un geómetra, y la de sir James Jeans de que Dios ama la aritmética. La religión racionalista en contraposición a la apocalíptica ha sido completamente dominada desde Pitágoras y, sobre todo, desde Platón, por las matemáticas y sus métodos.
Russell, B. (2004). Historia de la filosofía occidental, p. 64.
  1. ¿Cuál es la pregunta que trata de responder este texto?
  2. Explique con sus palabras la tesis que se defiende en el texto.
  3. Muestre las ideas y la estructura argumental de que se sirve el autor para defender esa tesis.
  4. ¿Qué otra posible respuesta puede darse o se ha dado en la historia de la filosofía a la pregunta que trata de responder este texto? Dé al menos dos argumentos para apoyarla.

 

En cuanto a los presocráticos, sostengo que existe la más perfecta continuidad de pensamiento posible entre sus teorías y los ulteriores desarrollos de la física. El que se los llame filósofos, precientíficos o científicos, interesa muy poco, creo. Afirmo que la teoría de Anaximandro desbrozó el camino para las teorías de Aristarco, Copérnico, Kepler y Galileo. No se trata de que haya «influido» simplemente en estos pensadores posteriores; la «influencia» es una categoría muy superficial. Más bien expresaría esto de la siguiente manera: las realizaciones de Anaximandro son valiosas en sí mismas, como una obra de arte. Además, sus realizaciones hicieron posibles otras realizaciones, entre ellas las de los grandes científicos mencionados. Pero ¿no son falsas las teorías de Anaximandro y, por lo tanto, no científicas? Son falsas, lo admito; pero también lo son muchas teorías, basadas en innumerables experimentos, que la ciencia moderna aceptó hasta hace poco y cuyo carácter científico nadie soñaría en negar, aunque ahora se crea que son falsas.
Popper, K. R. & Solís, S. C. (1992). Conocimiento objetivo. Un enfoque evolucionista, pp. 179-180.
  1. ¿Cuál es la pregunta que trata de responder este texto?
  2. Explique con sus palabras la tesis que se defiende en el texto.
  3. Muestre las ideas y la estructura argumental de que se sirve el autor para defender esa tesis.
  4. ¿Qué otra posible respuesta puede darse o se ha dado en la historia de la filosofía a la pregunta que trata de responder este texto? Dé al menos dos argumentos para apoyarla.

 

Artículo

 

Pasos para escribir un artículo filosófico (I)
1. ¿Cómo elegir el tema?
Tipos de temas
Para elegir un tema adecuado, hay que decidir si se prefiere investigar sobre un tema abierto y general, uno cerrado y concreto o uno de contraste entre varias posiciones.

Tema abierto y general:

Se trata de temas como La felicidad o El conocimiento humano, en el que prima el enfoque personal o ideas previas de cada autor, pues este tiene libertad para elegir las fuentes que le permitan desarrollar su propio pensamiento. Esta clase de temas tiene, principalmente, dos tipos de dificultades. En primer lugar, dar con un punto de vista personal y original sobre ellos. Por eso es muy común que el enfoque vaya cambiando o afinando según se vaya avanzando en el proceso de investigación y reflexión. En segundo lugar, la selección de fuentes relevantes para el enfoque que se le dé. Eso requiere de un gran conocimiento de todas las fuentes disponibles. Por otra parte, la selección de las fuentes tiene que estar justificada. Por ejemplo, no sería razonable tratar el problema del cambio climático buscando fuentes de la Edad Media, pues no es un tema que se tratase en aquella época.

Tema cerrado y concreto:

Son temas como La justicia en la República de Platón o La vía de la verdad en el poema de Parménides, que se centran en unos autores u obras concretas. Por eso es muy importante conocer en profundidad los argumentos involucrados en ellos. Esta clase de temas tiene, principalmente, dos tipos de dificultades. La primera consiste en formular con precisión la pregunta o cuestión que se va a tratar. Esta tiene que ser muy concreta para poder ordenar en torno a ella toda la estructura argumental. Si resulta demasiado amplia o vaga, será imposible avanzar una tesis y apoyarla de forma eficaz con nuestros argumentos. La segunda consiste en contextualizar suficientemente el origen y los filósofos involucrados en el tema. Por ejemplo, si el tema es La justicia en la República de Platón, habría que explicar el contexto sociopolítico en el que Platón escribió esa obra y qué es lo que pretendía con ella.

Tema de contraste entre varias posiciones:

Son temas como El problema del movimiento en Heráclito y Parménides o Las normas sociales para Sócrates y los sofistas. Es decir, son temas en los que se confrontan las posiciones de dos o más filósofos o corrientes filosóficas. Esta clase de temas requiere del conocimiento preciso de los argumentos de cada una de las partes, así como sus puntos fuertes y débiles, para valorarlos con objetividad y poder luego proponer un veredicto justo.

 

La emergencia del tema
Una vez que tenemos claro el tipo de tema que queremos abordar hay que pensar en los autores o corrientes del pensamiento que nos resultan más atractivos, los que mejor entendemos, aquellos con los que estamos más de acuerdo y con los que menos, etc., teniendo siempre como horizonte la idea de hacer un artículo sobre ellos. En este punto, lo mejor es ir a lo más cercano, sencillo, entendible y fácil para nosotros, puesto que la complejidad la encontraremos inevitablemente según profundicemos en la investigación.
La concreción del tema está imbricada o superpuesta a la selección de las fuentes. Si nos interesa, por ejemplo, la figura de Platón, lo primero es conocer algo más de él a través de vídeos, documentales, manuales de divulgación o enciclopedias, que nos proporcionarán puntos de vista y temas más específicos que quizá no conocíamos. De esa manera veremos cómo el tema que realmente nos interesa emerge de entre todos los demás.

 

Posibles temas para el artículo
Antropología
  • La noción de alma en Platón
  • El concepto de persona en Agustín de Hipona
  • El dualismo antropológico de Descartes
  • Qué es el hombre según Kant
  • Del humano al superhombre en Nietzsche
Teoría del conocimiento
  • La teoría del conocimiento de Platón
  • El conocimiento de Dios según Tomás de Aquino
  • El debate moderno entre el racionalismo y el empirismo
  • La Crítica de la razón pura kantiana
  • La posibilidad del conocimiento científico en Popper
Ética o moral
  • La ética platónica
  • El eudemonismo aristotélico
  • Agustín de Hipona y el problema del mal
  • El emotivismo moral de Hume
  • La ética formal kantiana

 

Metafísica u ontología
  • Realidad y apariencia en Platón
  • La naturaleza en Aristóteles
  • La existencia de Dios en Tomás de Aquino
  • Las Meditaciones metafísicas cartesianas
  • Entre el fenómeno y el noúmeno kantiano
Sociedad o política
  • La controversia entre «physis» y «nomos» respecto de las normas sociales
  • El debate sobre la justicia en la República de Platón
  • La política aristotélica
  • La política de Maquiavelo
  • La ciencia política de Hobbes

La elección del tema del artículo es clave. Se debe elegir uno que le llame la atención, le atraiga por alguna razón, lo considere importante, sienta alguna curiosidad por él, que sea divertido o sobre el que se tenga una fuerte opinión previa, ya sea a favor o en contra. La elección de un tema que se considera aburrido dará lugar a falta de interés por estudiarlo y a un artículo malo.
1. Elija un tema y comience a buscar fuentes secundarias y primarias sobre él.

 

Recursos

 

Bibliografía:
  • Abbagnano, N. (1994). Historia de la filosofía. Vol 1. Hora.
  • Barnes, J. (2000). Los presocráticos. Cátedra.
  • Bueno, G. (1974). La Metafísica presocrática. Pentalfa.
  • Capelle, W. & Lledó, E. (1992). Historia de la filosofía griega. Gredos.
  • Copleston, F. C. (2001). Historia de la filosofía I. Ariel.
  • Cornford, F. M. (1980). Antes y después de Sócrates. Ariel.
  • Cornford, F. M. (1984). De la religión a la filosofía. Ariel.
  • Diógenes Laercio. (2020). Vidas de los filósofos más ilustres. Página:Diogenes Laercio Tomo I.djvu/34. (2020, marzo 15).
  • Eggers, L. C. (1981). Los filósofos presocráticos 1. Gredos.
  • Eggers, L. C. (1979). Los filósofos presocráticos 2. Gredos.
  • Eggers, L. C. (1980). Los filósofos presocráticos 3. Gredos.
  • Gigon, O. (1985). Los orígenes de la filosofía griega: De Hesíodo a Parménides. Gredos.
  • Guthrie, W. K. C. (1984). Historia de la filosofía griega. Tomo I. Gredos.
  • Guthrie, W. K. C. (1984). Historia de la filosofía griega. Tomo II. Gredos.
  • Kirk, G. S., Raven, J. E., Schofield, M., & García, F. J. (2014). Los filósofos presocráticos: Historia critica con selección de textos. Tomo I. Gredos.
  • Kirk, G. S., Raven, J. E., Schofield, M., & García, F. J. (2014). Los filósofos presocráticos: Historia critica con selección de textos. Tomo II. Gredos.
  • Kirk, G. S., Raven, J. E., Schofield, M., & García, F. J. (2014). Los filósofos presocráticos: Historia critica con selección de textos. Tomo III. Gredos.
  • Kenny, A. (2005). Breve historia de la filosofía occidental: Paidós.
  • Martínez Marzoa, F. (2000). Historia de la filosofía antigua. Akal.
  • Martínez Marzoa, F. (2000). Historia de la filosofia vol. 1: Istmo.
  • Popper, K. R. & Solís, S. C. (1992). Conocimiento objetivo. Un enfoque evolucionista: Paidós.
  • Russell, B., Gómez, . S. J., Dorta, A., & Mosterín, J. (2004). Historia de la filosofía occidental. Espasa-Calpe.
  • Sánchez Meca, D. (2013). Historia de la filosofía antigua y medieval: Dykinson.
  • Vernant, J.-P. (1973). Mito y pensamiento en la Grecia antigua. Ariel.
  • Vernant, J.-P. (1992). Los orígenes del pensamiento griego. Paidós.
  • Verneaux, R. (1988). Textos de los grandes filósofos. Edad Antigua. Herder.

 

Vídeos:

Argumentación

 

Posible cuestión del examen argumentativo:
1.- ¿Qué utilidad podría tener en la actualidad el estudio de la filosofía presocrática?

 

Elementos del texto argumentativo
  • Interpretación y contextualización de la cuestión
    • Maneras de entender o interpretar la pregunta. ¿A qué se refiere la pregunta? Algunos de los conceptos que aparecen en ella se pueden interpretar de diferentes maneras, por lo que se puede referir a muchas cosas. Así que hay que interpretarla, concretarla. En este punto hay que señalar los conceptos que admiten más de una interpretación y escribir cómo se reformularía la pregunta inicial dándole cada una de esas interpretaciones.
    • Implicaciones de tal o cual interpretación de la pregunta. De cada una de las interpretaciones que hemos dado de la pregunta inicial hay que decir qué consecuencias tendría planteárnoslas. Es decir, para qué serviría responder a cada una de esas interpretaciones.
    • Relevancia o importancia de tal o cual interpretación. Hay que decir cuál de las interpretaciones que se han dado de la pregunta inicial sería más interesante o importante, diciendo por qué. Y también por qué las otras no son tan relevantes y por qué.
    • Elección de una interpretación de la pregunta a la que dar respuesta. Aquí hay que decir que se elige dar respuesta a la interpretación que antes se ha dicho que es la más importante. Si se elige otra, sería incoherente, por lo que restaría puntos.
    • Problemas u otras cuestiones asociadas a la interpretación elegida. La interpretación que se ha elegido como la más importante da lugar a otras preguntas relacionadas con ella. Aquí hay que escribir alguna de esas otras preguntas.
  • Tesis (respuesta tentativa a la pregunta)
    • Postura que se va a defender en la disertación. Es decir, aquí hay que responder en una frase clara y concisa a la interpretación que se ha elegido.
  • Argumentos a favor de la tesis (al menos 2)
    • Explicación detallada de cada argumento. Deben ser argumentos que apoyen, sustenten, la tesis dada y deben de estar clara y suficientemente explicados. Se pueden poner ejemplos.
    • Se debe utilizar, al menos, una cita bien referenciada y explicada de una fuente fiable. Se pueden utilizar citas directas e indirectas.
  • Argumentos en contra de la tesis (al menos 2)
    • Explicación detallada de cada argumento. Deben ser argumentos que refuten, nieguen, la tesis dada y deben de estar clara y suficientemente explicados. Se pueden poner ejemplos.
    • Se debe utilizar, al menos, una cita bien referenciada y explicada de una fuente fiable. Se pueden utilizar citas directas e indirectas.
  • Valoración comentada de la potencia e importancia de los argumentos para apoyar o refutar la tesis. Aquí hay que decir qué tipo de argumentos, los a favor de la tesis o los en contra de la tesis, tienen más peso, son más razonables, argumentando por qué.
  • Conclusión
    • Explicación de si se reafirma en la tesis o se cambia de postura. Es decir, hay que explicitar si, dada la valoración hecha antes, se sigue estando de acuerdo con la tesis o si se ha cambiado de opinión porque han resultado más convincentes los argumentos en contra.
    • Consecuencias o implicaciones para el mundo actual de la postura adoptada. Aquí hay que decir qué pasaría o debería pasar en el mundo si es correcta la conclusión final a la que se ha llegado.